¿Por qué es importante usar formatos abiertos?
¿Qué es un formato de archivo?
Comencemos hablando sobre a qué nos referimos cuando hablamos de un formato. El formato de un archivo hace referencia a cómo está guardada la información en un objeto digital. Así, aunque dos imágenes puedan ser exactamente iguales, si una está en formato JPG y la otra en PNG, la información sobre la imagen estará almacenada de manera diferente en cada formato, e incluso es muy probable que los dos archivos tengan un tamaño diferente debido a esta razón. La especificación del formato dice cómo se almacena la información, por ejemplo, una especificación podría indicar “los primeros 32 bits del archivo indican la resolución de la imagen”.
¿Qué son los formatos abiertos y cerrados?
En los formatos abiertos la especificación está disponible para cualquier persona de forma gratuita, de manera que cualquiera puede saber cómo se almacena la información en un formato abierto, y cualquiera puede desarrollar un programa capaz de leer y crear archivos en un formato abierto. Por el contrario, si el archivo es cerrado, significa que su especificación es propiedad de alguna compañía, y generalmente solo esa compañía sabe exactamente cómo se almacena la información en el archivo. Esto trae limitaciones, porque ya no cualquiera puede desarrollar un programa que pueda crear un archivo con formato cerrado, ya que no sabrá cómo tiene que almacenar los datos o se lo impedirán los términos legales del formato.
¿Por qué usar formatos abiertos?
Garantía de acceso a largo plazo. Imaginemos un escenario hipotético en el que de un momento a otro desaparecen todos los programas que permitían abrir un tipo de archivo en específico. Al ser formatos abiertos y ser su especificación libre y accesible para todos, sería muy sencillo para un programador crear un nuevo programa capaz de abrir y leer este tipo de archivo. En cambio, con un formato cerrado, tendría que ser la compañía propietaria del archivo quien cree un programa para abrirlo, porque solamente la compañía conoce o tiene derechos sobre la forma de almacenamiento de la información en ese archivo.
Transparencia en el contenido de los archivos. Al tener una especificación abierta, cualquiera puede saber qué contiene específicamente un archivo en su interior, aunque se requiera algo de programación para ello. Con archivos cerrados, al no conocer enteramente la especificación, estos podrían tener información oculta que solo la compañía propietaria del formato conoce y sabe su significado.
Mayor interoperatividad. Muchas aplicaciones son capaces de leer y manipular formatos abiertos. Con los formatos cerrados, pasa habitualmente que solo el programa diseñado por la misma compañía propietaria del formato es capaz de trabajar apropiadamente con él.
Desventajas de los formatos cerrados
Además de las desventajas ya mencionadas de los formatos cerrados, tenemos también los siguientes problemas:
Costo: Muchos de los programas necesarios para abrir y crear archivos con formato cerrado son software de pago, por lo que conseguirlo o actualizar su licencia representa un gasto económico.
Intereses: Los formatos cerrados son diseñados y controlados por su propietario, cuyos intereses pueden no estar bien alineados con los intereses del público general o de sus usuarios, por lo que un formato puede no estar diseñado para funcionar de manera óptima para el usuario sino para funcionar de manera óptima para la compañía; por ejemplo, el archivo podría tener secciones cuya especificación es deliberadamente compleja para que solo el programa propietario lo pueda abrir correctamente y evitar su uso por la competencia.
Obsolescencia: Los archivos en formatos cerrados tienen mayor probabilidad de quedar obsoletos en el futuro porque es posible que el software necesario para abrirlos y manipularlos deje de ser mantenido o su propietario decida hacer modificaciones y dejar de dar soporte al formato.
Cambiando nuestros hábitos
Después de conocer sobre los formatos abiertos, la tarea es habituarnos a usarlos más a menudo. En la siguiente tabla puedes encontrar cuáles son las alternativas abiertas a algunos formatos propietarios lamentablemente muy extendidos:
Tipo de archivo | Formato cerrado | Formatos abiertos |
---|---|---|
Tabla | .xlsx | .ods, .tsv, .csv |
Texto enriquecido | .docx | .odt |
Presentación | .pptx | .odp |
El cambio es tan sencillo como hacer click en Guardar como
en el menú del programa que estés usando y luego elegir el formato apropiado.